mercredi 5 septembre 2007

Poemas insolentes como el Dolor



Recuerdo del «Quita Pena»
Por Jaime SEREY

Fue en un restaurante desolado con olores a litros de vinagre,
Fue con un hermano que solo sabia cantar para la vida cruel,
Fue en el cebo, en el humo, en la cebolla frita y en los mariscales
Todo reunido con el corazón, el cerebro y la muerte de mi padre.

Fue la pobreza y la miraba pobre dentro de un espejo sucio de aceite negro
Desde la cocina hasta las frituras tristes hirviendo en las cacerolas de los pescados fritos
Mas deseado por el llanto solitario de un alcoholico mortal
Fue el hambre profundo y la identidad de un mendigo desconocido.

Fue una mirada a las pintura borrosas y descoloridas que colgaban de la pared.
Fue una mirada a las cuatro bujías y a las moscas que formaban un círculo nupcial
Volando y volando con sus ritmos fúnebres y musicales
Brutalmente con mucha hambre… hambre de comer y vivir.

Fue después de comer un plato de sopa de huesos
Fue despues sobre una vieja mesa adornado por un roto mantel
Que en otros tiempos fuera bello y bordado por una mano fiel
de placeres amargos, pero a la vez un poco alegre.

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