lundi 20 août 2007

Mi Árbol genealógico


A mi Padre,
Emilio Orlando Serey Gardaix
(1917-2000)
Por Jaime Serey

No hay que dejar que la Muerte
Nos llegue como Dios manda
No hay que dejar que las piedras
No hay que dejar que los caminos
No hay que dejar que los paisajes
Desaparezcan por completo
De nuestros ojos abiertos
No hay que dejar que la Muerte
Entierre sus raíces en los huesos
O sus dientes de barro mineral
En el remolino del corazón
Pido que defendamos la vida
Que la luz del día sea
De cuarenta y ocho horas
Y que los pájaros no
Y el pasto que crece no
Y el hijo no
Y el relámpago no
La Madre no
La esposa no
Los enamorados no
Y que mi

Padre no desaparezca
Pido permiso Señores
Para atacar hoy a la Muerte
Que se esconde con su manto gris
Y una grande flor de Cenizas.


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